¿Podría convertirse la viruela del mono en una nueva pandemia?
Además de en África, donde la viruela del mono es endémica, este virus se está extendiendo en los últimos días por distintas partes del mundo. Para que una infección se considere una pandemia, el virus ha de estar presente en diversos continentes y haber una transmisión comunitaria. Además, los expertos recuerdan que las infecciones deben afectar a un gran número de personas y, afortunadamente, este todavía no es el caso.
Cuando el mundo aún no se ha recuperado del sobresalto provocado por el SARS-CoV-2, causante del coronavirus, un particular brote de viruela conocida como monkeypox o viruela del mono ha puesto en alerta a las autoridades sanitarias. El causante de esta dolencia es un virus endémico de África central y occidental transmitido, muy probablemente, por roedores y que afecta a otros animales, como los monos, y también a los seres humanos. Con estos antecedentes, ¿sería posible que termine causando una epidemia como la del Covid-19? «Nos encontramos en una situación muy nueva; por eso hay sorpresa y preocupación«, ha declarado al respecto Peter Horby, director del Instituto de Ciencias de la Pandemia de la Universidad de Oxford (Reino Unido).
Sin embargo existen buenas noticias al respecto. Afortunadamente, los virus de la familia que causa los diferentes tipos de viruela, los Orthopoxvirus, no se dispersan con tanta facilidad por el aire, aunque sí pueden estar presentes en las gotitas de saliva que se expulsan al toser o estornudar. De hecho, a diferencia del coronavirus, que se expande básicamente a través de los aerosoles, los virus de la viruela requieren de un contacto mucho más estrecho con las secreciones de las personas contagiadas, lo que a la larga evita un contagio tan masivo de la población. Asimismo, el hecho de que la capacidad para contagiar de alguien empieza cuando las primeras pústulas ya se encuentran presentes en la boca y la garganta hace que un contagiado pueda prevenir con más facilidad la transmisión a otras personas de su entorno.
Sin vacuna contra la viruela del mono
La pregunta en cualquier caso es: ¿Esta enfermedad podría convertirse en una nueva pandemia? Uno de los datos que más tranquiliza es que las vacunaciones masivas contra la viruela llevadas a cabo en el pasado pueden haber otorgado a millones de personas cierta protección contra la viruela del mono. «Probablemente se está transmitiendo de manera más efectiva que en la era de la viruela, pero no vemos nada que sugiera que pueda extenderse sin control«, explica Hugh Adler, investigador del Liverpool School of Tropical Medicine (LSTM), que espera que este brote se desvanezca por sí solo.
Por su parte, Jimmy Whitworth, de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres, ha apuntado que «no creo que la gente en general deba preocuparse en esta etapa en la que nos encontramos, pero tampoco creo que lo hayamos descubierto todo ni que tengamos el control total de lo que está pasando«.
Todavía quedan muchas incógnitas científicas por resolver. De hecho, a pesar de la más que probable protección brindada por la vacuna de la viruela tradicional, hasta ahora no existe un tratamiento específico para combatir la viruela del mono. Sin embargo, como indica el catedrático de Microbiología de la Universidad de Salamanca, Raúl Rivas González en un articulo publicado en The Conversation, los antivirales cidofovir y ST-246, así como algunas inmunoglobulinas específicas, pueden ser empleados para controlar un brote de este tipo.
Aunque en España la vacuna de la viruela dejó de administrarse en los años ochenta, el Centro Europeo para la prevención y el Control de Enfermedades (ECDC) cree que es recomendable que las personas de alto riesgo que hayan mantenido contacto directo y estrecho con algún infectado por la viruela del mono se vacunen de la (afortunadamente extinta) viruela.
Fuente: nationalgeographic