
Amenazas digitales: 5 Claves para detectar, contener, reaccionar y mitigar los efectos de los ciberataques
Del 26 al 28 de marzo, Panamá será del 5to Congreso Internacional de Ciberseguridad, Prevención de Fraude y Seguridad Física.
Panamá, 26 de marzo de 2025.- En cuestión de minutos, una organización podría quedar paralizada por un ciberataque. La pregunta del millón es: ¿Está su organización preparada para responder y recuperarse?. En un mundo donde la digitalización avanza sin freno y los ciberdelincuentes perfeccionan sus estrategias, las organizaciones deben mantenerse un paso adelante.
Pensando en esta realidad, éste será uno de los temas centrales que se abordarán en el 5to Congreso Internacional de Ciberseguridad, Prevención de Fraude y Seguridad Física, que se llevará a cabo del 26 al 28 de marzo de 2025, en la ciudad de Panamá, donde expertos y líderes de la industria compartirán, entre otros puntos, sus conocimientos, y buenas prácticas para enfrentar el fraude digital y cómo construir una defensa sólida frente a las amenazas que ya están afectando a millones de personas y compañías en todo el mundo.
“No es cuestión de que, si su organización será atacada, sino de cuándo ocurrirá. La clave está en cómo responderá para minimizar el daño», advierte Yasmin Chávez, gerente del Departamento de Respuesta a Incidentes y Forense Digital del CERT de Sistemas Aplicativos S.A. En este contexto, anticiparse a las amenazas y tener un plan de respuesta robusto es esencial para garantizar la continuidad del negocio y mantener la confianza de clientes y socios.

En ese orden de ideas, elaborar un plan de respuesta a incidentes sólido es fundamental para detectar, contener, reaccionar y mitigar los efectos de los ciberataques. Este plan debe ser integral y adaptado a las necesidades específicas de cada organización, combinando medidas preventivas y reactivas para enfrentar amenazas de manera efectiva y sustentado en 5 componentes claves:
1. Detección temprana y monitoreo continuo: Es vital contar con herramientas y sistemas que identifiquen actividades anómalas en tiempo real. Si la organización no cuenta con la capacidad propia para instalar un centro de monitoreo, puede externalizarlo a través de un SOC que monitoree los sistemas 24/7. Las soluciones de inteligencia artificial y análisis de datos ayudan a detectar patrones inusuales que pueden indicar un intento de intrusión. Es importante que se configuren de forma adecuada para reducir falsos positivos, y que se generen las alertas críticas para el negocio. Esto permite responder de inmediato y reducir el riesgo de un ataque exitoso.
2. Respaldos de información: Uno de los pilares fundamentales de una estrategia de ciberseguridad efectiva es la implementación de respaldos (backups) de información y sistemas en un ambiente externo y seguro. Esto significa contar con copias de seguridad almacenadas fuera de la infraestructura principal, en entornos cifrados y protegidos contra accesos no autorizados.De esta manera, en caso de un ciberataque como un ransomware, donde los archivos originales pueden ser encriptados o eliminados, la empresa podrá restablecer sus operaciones rápidamente sin comprometer la continuidad del negocio. La clave está en realizar respaldos de forma periódica, probar su recuperación y asegurarse de que estén aislados de la red principal para evitar que sean afectados por la misma amenaza.
3. Protocolos de actuación y contención: Una vez identificado un incidente, disponer de protocolos claros es esencial para contener la amenaza. Esto incluye la implementación de medidas para aislar los sistemas afectados y la activación de procedimientos que eviten la propagación del ataque, reduciendo el impacto global. Las organizaciones deben contar con planes que les indiquen cómo actuar según el tipo de amenaza, de manera que se pueda controlar el ataque y minimizar el daño. También es importante determinar la forma en que se comunicará un incidente a los colaboradores y a terceros.
4. Capacitación y simulacros: La preparación del equipo es fundamental. La realización de capacitaciones periódicas y ejercicios simulados permite a los empleados familiarizarse con los procedimientos de respuesta, identificar áreas de mejora y garantizar una actuación rápida y coordinada cuando se produzca un incidente real.
5. Revisión y actualización continua: Dado que el panorama de amenazas está en constante evolución, y debido a la transformación en infraestructura, tecnología y estructura organizacional, el plan debe revisarse y actualizarse de forma regular, al menos una vez al año. Tras cada incidente o simulacro, es importante analizar los resultados y ajustar los protocolos, asegurando que la estrategia de respuesta se mantenga.
La ciberseguridad no es solo una inversión en tecnología, sino en la resiliencia organizacional. Prepararse adecuadamente puede ser la diferencia entre la recuperación rápida o el colapso frente a un ataque. Por lo tanto, los líderes empresariales deben considerar este congreso no solo como un evento educativo, sino como una oportunidad para fortalecer sus estrategias y prepararse para un futuro más seguro en un mundo digital en constante evolución.