Las 500 a Pánfilo Patricio – Traslados de Partidas para el 2024, las modificaciones más notorias
El 2024 es un año de muchos acontecimientos políticos en Panamá, destacando en primer lugar, las elecciones del 5 de mayo y en segundo la toma de posesión el 1 de julio, de una nueva administración gubernamental. Lo peculiar en estos dos eventos, es que Panamá vivirá dos administraciones de gobierno, cuyo Presidente de la República no será la misma persona ni con el mismo liderazgo, pero sí con un único presupuesto general del Estado aprobado mediante Ley.
Esta situación supone la obligación legal y moral, de que la actual administración en el ocaso de su gestión se caracterice con responsabilidad en las finanzas públicas y no mal gaste, derroche o dilapide, más del 50% de los ingresos presupuestados para este año.
Sin embargo, un “presupuesto” es exactamente eso, suponer una situación financiera y económica antes de que ocurra, y en el caso de la Ley 418 del 29 de diciembre de 2023, es el instrumento de planificación del Estado, que va a ser gestionado y ejecutado por dos administraciones distintas, pero que en la realidad la veracidad de los ingresos proyectados se sabrá a partir de la segunda mitad del año, es decir, con el nuevo presidente.
Con la reciente aprobación de la Ley 418 del 2023, que aprueba el Presupuesto del Estado para el 2024, podemos compararlo con el presupuesto del 2023, aprobado en la Ley 336 del 14 de noviembre del 2022, y específicamente la afectación en el rubro de los traslados de partidas, que en el fondo alterará su ejecución.
Un traslado de partida es la transferencia de recursos en las partidas del Presupuesto, con saldos disponibles de fondos o sin utilizar, a otras que se hayan quedado con saldos insuficientes o que no tengan asignación presupuestaria (artículos 319/Ley 336 de 2022 y 325/Ley 418 de 2023).
A partir del 15 de enero del 2024 las instituciones pueden iniciar el trámite de traslados de partida, cuando el año pasado era a partir del 1 de febrero. Estos traslados de partida podrán ser para el caso de presupuesto de inversión, de gastos de funcionamiento para la atención de los servicios sociales y ahora en este año para el servicio de la deuda pública, lo cual no aplicaba para el año 2023.
Otro cambio que se destaca en el 2024, es que se remitirán traslados de partida de cualquier monto, para ser aprobado o rechazados ante la Comisión de Presupuesto de la Asamblea Nacional, cuando en el 2023 se requería el trámite para aquellas que superaban los B/.200,000.00.
Finalmente, otro cambio relevante es que se acortó el tiempo de aprobación del traslado de partida. Si la Comisión de Presupuesto no realiza ninguna actuación dentro de los 15 días calendarios de recibida la solicitud se entenderá que ha sido aprobada la modificación. En el presupuesto del 2023, este tiempo era de 30 días calendarios.
El incluir el servicio de la deuda pública, que los traslados de partida se puedan solicitar de forma prematura al 15 de enero, que sean de cualquier monto y que el tiempo de actuación de la Comisión para aprobar o rechazar se haya acortado de 30 a 15 días, son cambios que afectarán políticamente la armónica colaboración entre el nuevo gobierno que tome posesión el 1 de julio de 2024 y la nueva Asamblea y Comisión de Presupuesto.
Esto tiene que cambiar.
“Vive honestamente, no le cause daño a nadie y dele a cada uno lo suyo”.
