Lukashenko dice que “no habrá otra opción” que cortar el gas a Europa si la UE impone nuevas sanciones
El presidente bielorruso acusa a Bruselas de no querer sentarse a negociar para solventar la crisis migratoria.
El presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, ha asegurado este lunes que recurrirá a cortar el suministro de gas a Europa en caso de que verse en una situación de “emergencia” a causa de las posibles nuevas sanciones impuestas por la Unión Europea contra el país. En una entrevista con la cadena de televisión turca TRT, ha indicado que “si las sanciones ponen a Bielorrusia en peligro, no habrá otra opción que responder con este tipo de medidas” y bloquear así el paso de gas a través del territorio bielorruso.
El mandatario bielorruso ya amenazó en noviembre con dejar a la UE sin el gas procedente de Rusia en caso de que Bruselas aplicara una nueva batería de sanciones en plena crisis migratoria en la frontera entre Bielorrusia y Polonia.
Posteriormente, Lukashenko ha asegurado que no dudará a la hora de hacer efectiva esta medida si Polonia procede a cerrar la frontera común. Sin embargo, el pasado 2 de diciembre, la UE anunció nuevas sanciones contra Minsk, cuyo objetivo son 17 individuos y más de una decena de organizaciones.
Bruselas sigue responsabilizando a Minsk de los miles de refugiados que se encuentran en la actualmente en la frontera a la espera de entrar en la UE para solicitar asilo. Sin embargo, Bielorrusia ha acusado de la crisis migratoria a las mafias europeas que operan desde Alemania, Polonia y otros países de la UE y que cobran a los refugiados para llevarlos a Europa.
Muy crítico con la UE
Además, ha acusado al bloque comunitario de no mostrar disposición alguna de “querer sentarse a la mesa para dialogar” y solventar la crisis migratoria. “Igual están interesados, pero no quieren hacer nada al respecto. (…) No quieren negociar con nosotros a pesar de haber nombrado a gente a cargo de las negociaciones. Seguramente estén muy ocupados. Hay muchos problemas ahora en la UE, así que asumimos eso“, ha manifestado.
Según ha explicado, tampoco hay conversaciones directas con Alemania al respecto: “ahora mismo no tenemos contactos”. “Hace un mes, la canciller Angela Merkel me llamó y hablamos del asunto“, ha recordado. En este sentido, ha vuelto a rechazar que Bielorrusia esté orquestando la crisis. “De hecho, si acusas a alguien de algo tienes que mostrar pruebas. Dadme pruebas y pediré perdón públicamente“, ha recalcado.
Lukashenko ha acusado además a Estados Unidos, junto a sus aliados europeos, de haber invadido precisamente países como Irak, Siria y Afganistán, de los cuales huyen ahora miles de personas. “Estas personas no tienen una casa, no tienen medios de vida para alimentar y abrigar a sus hijos. Pero lo peor es que no tienen futuro allí“, ha lamentado.
Para él, la UE ha dejado de cumplir con sus obligaciones en relación con los acuerdos de readmisión de migrantes. “Han decidido sacar adelante su política para Bielorrusia y ahora nos acusan de cosas. Las acusaciones no tienen base ninguna. ¿Por qué lo hacen? Para poder ejercer presión sobre nuestro país“, ha dicho.
Lukashenko ha aprovechado la ocasión para insistir en que Bielorrusia “no está obligando a los refugiados a volver a sus países de origen”. “Les prometí no hacerlo. Si puedes nombrar a alguien que haya sido forzado a volver lidiaré con ello personalmente. No somos bárbaros y no les forzamos a volver allí donde se podrían enfrentar a la muerte“, ha destacado.
Sobre este aspecto ha alertado, además, de que “ya es invierno”. “No sobrevivirán ahí. Les damos todo lo que necesitan. (…) Nos cuesta dinero. Les pedimos que intenten tomar una decisión pero no les obligamos bajo ningún concepto“, ha continuado. “Durante la Segunda Guerra Mundial, los ucranianos, bielorrusos y rusos fuimos refugiados. Cuando la Alemania nazi invadió la Unión Soviética, las repúblicas musulmanas, así como Irán e Irak, nos dieron refugio“, ha recordado.
Sobre el reconocimiento por parte de la UE de su victoria en las elecciones celebradas en agosto de 2020 -y que derivaron en una fuerte ola de protesta liderada por la oposición-, Lukashenko ha señalado que se trata de una “cuestión de gustos”.
“No le pido a nadie fuera del país que reconozca mi legitimidad. Ni Bielorrusia ni Turquía necesitan que otros estados les reconozcan. Me es suficiente que mi propio pueblo, el que me ha elegido, lo haga y me considere el presidente legítimo bajo la Constitución“, tal y como ha recogido la agencia de noticias BelTA.
Respecto a la integración con Rusia, ha aclarado que ambos países avanzan en este sentido “dentro de un espacio económico común“. “Este es el futuro de nuestra unión. Queremos hacer más progresos“, ha aclarado antes de incidir en que ya “han logrado que rusos y bielorrusos posean los mismos derechos“. “No hay casi diferencias en materia de educación, sanidad o cultura“, ha añadido.
Por 20minutos