Mueren 25 militares argelinos mientras intentaban extinguir los incendios al norte del país
En total, son 37 las personas que han perdido la vida a causa de los incendios en el norte de Argelia.
Este martes han perdido la vida un total de 25 militares argelinos y otros trece han resultado heridos cuando trataban de extinguir la treintena de incendios que azotan desde el lunes la región de la Cabilia -al noroeste-, lo que asciende a 37 el número de víctimas mortales en las últimas 24 horas.
“Con gran tristeza y sufrimiento he sabido la noticia de la muerte de los 25 miembros del Ejército Nacional Popular después de que lograsen salvar a más de un centenar de ciudadanos de las llamas“, ha declarado el presidente de la República, Abdelmadjid Tebboune, a través de las redes sociales.
En declaraciones a la agencia estatal APS, el director general de Bosques, Ali Mahmoudi, ha revelado que 103 incendios forestales continúan activos en 17 de las 48 wilayas -provincias- del país, para lo que se han movilizado más de 600 agentes de la Protección Civil.
El ministro del Interior, Kamel Beldjoud, ha declarado este martes durante su visita a Tizi-Ouzou, la wilaya más poblada y también la más castigada, que se trata de incendios de “origen criminal” y ha anunciado una delegación de hasta 140 expertos que se desplazará este sábado a las zonas siniestradas para evaluar los daños y pérdidas provocados por el fuego.
La lucha contra el fuego y las condiciones ambientales
Los fuertes vientos y el difícil acceso a las zonas montañosas dificultan las labores de extinción y cientos de habitantes de varios municipios han sido evacuados y alojados gratuitamente en hoteles y salas de fiestas de la región.
Dos meses antes, las autoridades se comprometieron a adquirir aviones cisterna, puesto que hasta ahora no cuentan con ninguno de estos aparatos. Argelia, que posee más de 4 millones de hectáreas de bosques, sufre en las últimas semanas una ola de calor con temperaturas que alcanzan los 47 grados, además de la escasez de agua que padece una parte importante de su población.
El pasado 25 de julio, durante un Consejo de Ministros, el presidente ordenó la elaboración de un proyecto de ley para castigar a los responsables de incendios voluntarios en zonas forestales con penas de hasta 30 años de prisión e incluso cadena perpetua en el caso de provocar víctimas mortales.
Los incendios son muy frecuentes cada verano en esta parte septentrional del país, solo el pasado año devastaron hasta 44.000 hectáreas de bosques, por lo que el gobierno ha lanzado un plan nacional de reforestación que aspira a plantar 43 millones de árboles de aquí a 2022, de los cuales más de la mitad ya se han llevado a cabo.
Fuente: RTVE.es / EFE