Yelitza Ortiz: Una mecánica de helicópteros que desafía estereotipos en el Senan
Panamá, 04 de septiembre de 2024.- Las mujeres en los estamentos de seguridad están más que preparadas para enfrentar cualquier desafío. Un claro ejemplo de esto es la sargento segundo Yelitza Ortiz, del Servicio Nacional Aeronaval (Senan), quien lleva cuatro años desempeñándose con éxito como mecánica de helicópteros de ala rotatoria.
Ortiz, quien se capacitó en la Academia Militar de Honduras como mecánica, cuenta con 12 años de servicio en el Senan, institución que le ha brindado la oportunidad de capacitarse, crecer y sacar adelante a su familia.
“En el Senan me desempeño como mecánica en mantenimiento de aeronaves, en el área de helicópteros, y mis aspiraciones son llegar a ser supervisora de este tipo de labores en un futuro no muy lejano”, comentó Ortiz.
Dentro de la carrera de aviación, Ortiz tiene la meta de ampliar aún más sus conocimientos.
La destacada mecánica también habló sobre las vivencias de compartir experiencias con sus compañeros de trabajo. “Es bonito compartir, es bonito aprender y adquirir conocimientos de otros compañeros que tienen mayor experiencia”, narró la uniformada.
Afirmó que su trabajo es continuo en cuanto a la distribución y el mantenimiento de los helicópteros cuando llegan de los vuelos, labor que, gracias a los conocimientos adquiridos, realiza de la mejor manera.
En la actualidad, son pocas las mujeres que realizan la labor de mecánica de aeronaves en el Senan, y no llegan a 15, según narró Ortiz.
La intrépida profesional no desaprovechó la oportunidad para enviar un mensaje a aquellas mujeres que aspiran a pertenecer a una institución de seguridad pública del país.
“Mi mensaje es que, gracias a Dios, nosotras podemos, y si se da la oportunidad, debemos aprovecharla de la mejor manera”, expresó.
Con orgullo, Ortiz habló de las labores que realiza, las cuales requieren de mucho esfuerzo y dedicación.
“El trabajo en cuanto a los sistemas, los motores y el combustible requiere esfuerzo, porque son ajustes que se hacen tanto en tierra como en vuelo, lo que demanda concentración y manejo con el piloto, dándole la información y él mismo tiene que verificar que en su instrumento esté acorde a lo que yo estoy hablando. Es bonito”, puntualizó la sargento segundo.
